Y tras un mes de pausa, llegamos al final de esta mini serie, una suerte de spin-off a partir de la que iniciamos dedicada a los artículos de escenografía que aparecieron en la White Dwarf, y que con esta tercera entrada concluye el repaso a los dedicados a Middle Earth Strategy Battle Game.
REGRESO A LA MINA DEL ENANO. LAS MINAS DE MORIA
Comenzamos en enero de 2006, tras un año 2005 que fue frenético, repleto de artículos de escenografía, y que vio también la aparición de un nuevo manual o reglamento básico, el primero de los nuevos suplementos dedicados específicamente a las películas y una nueva caja de inicio ambientada en Moria. Resultaba lógico entonces, encontrar un artículo dedicado a recrear el reino enano casi al mismo tiempo que esta última hacía su aparición en el catálogo.
El artículo era realmente una ampliación de reglas para darle una vuelta de tuerca a las partidas ambientadas en ese reino subterráneo. Pero entre las ideas que se exponían, aparecían diferentes referencias a elementos de escenografía que deberían tomar especial protagonismo al jugar: plataformas, escombros, alijos de armas, etc. Todo ello pensando en la mina como un lugar abandonado en el que el paso del tiempo tenía que haber hecho mella. Incluso se presentaba el Trono del Rey, y una plataforma de piedra sobre la que podía colocarse, conectándola con el resto de plataformas y pasarelas que pudiéramos haber construido.
Todo lo que se planteaba en el artículo encajaba a la perfección con lo que se incluía en el suplemento La Compañía del Anillo, del que hablábamos antes como el primer suplemento de esta nueva etapa post películas. De hecho, las plataformas, pasarelas y formaciones rocosas eran idénticas. De esta forma, podíamos expandir nuestra propia mina, dando pie a nuevas combinaciones y, por ende, nuevas posibilidades de juego.
LAS MONTAÑAS NUBLADAS
Ese mismo enero, Matt Ward seguía avanzando en la descripción de su campaña narrativa ambientada en Las Montañas Nubladas. En esa ocasión, además de proponer más escenarios, hablar de la contratación de mercenarios o hacer un repaso a diferentes guerreros y héroes, hacía mención a diferentes elementos de escenografía que podían protagonizar alguno de esos escenarios o resultar claves en su desarrollo. Alguno de ellos ya habían visto la luz en la revista, como la torre de vigilancia de Rohan, pero también había otros: pozos, montones de armas, empalizadas u hogueras.
La imagen anterior me recuerda mucho al tipo de escenografía que la colección de fascículos Batallas en la Tierra Media, propuso en los artículos dedicados a ello. De hecho, creo que la empalizada fue uno de los elementos que se abordaron, así como la creación de hogueras.
CASTILLO DEL ESTE
En enero de 2006 se había anunciado la llegada de otro suplemento: La Sombra en el Este. Centrado en los habitantes de Rhûn y Khand, incluía también con muchas propuestas de escenografía algunas de las cuales ya he llevado a cabo, como el Templo del Este (aquí) o las Torres de Vigilancia (aquí).
La revista ampliaba las posibilidades del suplemento y se lanzaba a la construcción de un Castillo del Este, otro de mis proyectos entre ceja y ceja (y eso que, a día de hoy, aún no tengo pintado mi ejército de Hombres del Este).
El artículo listaba las herramientas, materiales y pinturas necesarios, aunque en esta ocasión no incluía ninguna plantilla. Sí podía echarse mano a las que se incluían en el suplemento mencionado para realizar las características ventanas.
La construcción se dividía en muros, torreón y puerta, y cada una de ellas se listaban los componentes necesarios para levantarlos, ya que se trataba de ir haciendo piezas más o menos similares con cartón pluma aunque con diferentes anchos y alturas, claro.
El techo del torreón seguía también las mismas directrices que el de las Torres de Vigilancia o el Templo del Este que aparecían en el suplemento.
Como el año pasado, y este mismo con más claridad aún, he realizado escenografía ambientada en un determinado entorno (Mordor/Isengard o el desierto), realizar este proyecto me atrae enormemente, pues podría sumarlo a lo que ya tengo. Además, he estado pensando en realizar otra serie de tableros en donde encajar el tapete de césped que tengo abandonado en el trastero, y representar con él las estepas o llanuras del este de la Tierra Media me parece una buena opción.
LA GUARIDA DE LA REINA DE LAS ARAÑAS
Casi sin tiempo entre uno y otro, y antes de que llegara el verano, veía la luz otro nuevo suplemento: La Caída del Nigromante. En él, al igual que en los anteriores, aparecían diferentes elementos de escenografía para recrear los escenarios, y entre ellos la guarida de la Reina de las Arañas. Se trataba de una cripta o algo así, y que ya he construido (aquí).
Pero en julio de 2006, la sección Taller de Modelismo nos proponía realizar un tablero casi totalmente esculpido con ese motivo. En él, la guarida era una gruta, aunque conservaba ese aire de túmulo gracias a las puertas que daba acceso a su interior.
Además de las ruinas de la Tierra Media, también se hacía uso del bosque de Citadel, pero en esencia y como decía, el tablero estaba esculpido, y no había elementos móviles en él.
No existía un paso a paso con imágenes, aunque sobre las imágenes del tablero terminado se detallaban algunas ideas y sí que se listaban los pasos en un cuadro destacado. Además, el artículo tampoco olvidada el listado de herramientas, materiales y pintura.
La última página se dedicaba exclusivamente a la creación de los árboles y el bosque, y dotarlos de la personalidad necesaria para incluirse en un tablero así.
LA GUARIDA DE LA REINA DE LAS ARAÑAS
PAZGHAR
A pesar del lanzamiento de nuevos suplementos y las novedades que los acompañaron, el 2006 no fue tan rico en artículos de escenografía como el año anterior. Así que tuvimos que esperar hasta diciembre para ver un nuevo artículo. Eso sí, volvía a ser un gran aporte, pues se nos proponía construir una fortaleza fronteriza de Gondor para protagonizar diferentes escenarios y ser el centro de atención de una campaña narrativa en esas regiones.
En esta ocasión, sí que podíamos ver un paso a paso en imágenes bastante detallado, en el que se construían los muros, se decoraban con la mampostería, se levantaban las almenas con el característico diseño de Gondor, etc. Y volvíamos a contar con un listado de materiales y herramientas, aunque no de pinturas (algo chocante en el listado era leer «pinturas necesarias», sin más).
El artículo incluía al final unas plantillas para realizar banderines o estandartes de Khand y Harad (los que se ven en la imagen superior), pero que también podían hacerse con otros motivos. La idea era que al tratarse de una fortaleza fronteriza y ser el centro de múltiples disputas, era susceptible de cambiar de manos rápidamente, por lo que con un simple intercambio de estandartes podríamos anunciar quienes eran los actuales inquilinos de la misma.
Aunque es un proyecto que también me ha atraído siempre, lo veo más complejo que el Castillo del Este, así que no es ahora mismo una de mis prioridades.
TABLERO DESÉRTICO
Pero mucho más tuvimos que esperar para ver un nuevo artículo, ya que hasta julio de 2007 no volvió a verse uno en la revista. Tampoco era un gran proyecto, ni se trataba de algo exclusivo, pues el artículo abordaba la construcción genérica de los tableros desérticos, aunque después, al ir repasando las características específicas de los de cada línea de juego, dedicaba un par de páginas al que nos ocupa.
Como decía, la primera página era un resumen genérico de los materiales y herramientas que necesitaríamos para enfrentarnos a un proyecto de estas características. Aquí las imágenes que aparecían correspondían a las arenas de Khemri, pero las indicaciones valían igualmente.
En las dedicadas a nuestro juego en sí, se usaban elementos móviles de plástico, como las colinas modulares o las ruinas de la Tierra Media, aunque dándoles el toque necesario para que funcionaran en un tablero desértico. Y también volvían a aparecer algunos elementos de escenografía que ya habían hecho acto de presencia en algún suplemento, como las tiendas haradrim.
TABLERO DE MORDOR
Y más de un año esperamos, hasta agosto de 2008, para ver el siguiente artículo que, además, repetía idea, pues nos proponía la creación de un tablero. Aunque la ubicación del mismo cambiaba y nos trasladaba al mismísimo Mordor.
El artículo comenzaba con el socorrido listado de herramientas, materiales y pinturas necesarias, así como con un conjunto de reglas alternativas para dotar a los elementos propios de esa tierra oscura de protagonismo real en el juego.
A continuación, se nos detallaba la construcción de los árboles retorcidos a partir del bosque Citadel de plástico. Para continuar con unos afloramientos rocosos, en los que me basé en su día para realizar mi propia versión (aquí). Y para terminar, se nos mostraba un tablero por el que corrían ríos de lava, dándonos indicaciones para su construcción por secciones. Tanto en éste como en el que apareció en el coleccionable Batallas en la Tierra Media, me basé para crear el mío el año pasado (aquí).
Como se ve en la imagen, las islas que formaban los ríos de lava podían rellenarse con los otros dos elementos previamente construidos: los árboles retorcidos y los afloramientos rocosos.
CAMPOS DE BATALLA PARA LA GUERRA DEL ANILLO
Nuevamente esperamos casi un año, hasta abril de 2009, para ver un nuevo artículo de escenografía, esta vez con el pretexto del lanzamiento de La Guerra del Anillo, el reglamento que permitía representar batallas enormes ambientadas en la Tierra Media.
El artículo realizaba un repaso a los campos de batalla perfectos para desarrollar partidas con el nuevo sistema, tomando como ejemplo las llanuras de Rohan, las ruinas de Osgiliath (que veían aquí aumentado su tamaño y presencia considerablemente) y el Abismo de Helm.
Como se ve en la imagen superior, existía una numeración, ya que el artículo trataba de profundizar algo más en elementos clave que deberían tener otro tipo de tratamiento en campos de batalla para La Guerra del Anillo. Por ejemplo, en este grandioso tablero que representaba las ruinas de Osgiliath, aparecía marcada una torre, cuyas medidas permitían tener sobre el suelo de su azotea un numerosísimo grupo de guerreros en formación. Lo mismo ocurría con los bosques o las distancias entre elementos, pensando siempre que el movimiento de las grandes unidades no se viera excesivamente afectado por su distribución en el tablero.
CAMPOS DE BATALLA PARA LA GUERRA DEL ANILLO
RUINAS DE OSGILIATH
En mayo de 2010 se repasaban las posibilidades del nuevo kit de Ruinas de Osgiliath o Ruinas de la Tierra Media. Este kit era algo más grande y tenía mayor detalle que el primero que apareció en las cajas de inicio. Con motivo de su aparición, Dave Andrews, su diseñador, mostraba las posibilidades de las nuevas matrices, no sólo en cuanto a sus posibles combinaciones, sino a la posibilidad de tematizarlas con las pinturas adecuadas.
El artículo no sólo incluía las reflexiones del diseñador, pues también se analizaba su impacto en el desarrollo de las partidas, tanto del juego de escaramuzas como en la versión de La Guerra del Anillo.
RUINAS DE ANGMAR
Unos meses después, en diciembre de 2010, y siguiendo la estela del artículo de Dave Andrews, se nos presentaba un tablero que trataba de evocar las desoladas ruinas de Angmar. En el se incluía un bosque de plástico Citadel transformado (como ya habíamos visto en anteriores artículos) y las nuevas Ruinas de Osgiliath adaptadas al particular entorno.
Pero como se puede comprobar en estos dos artículos de 2010, el Taller de Modelismo se centró en sacar partido a los nuevos elementos de escenografía Citadel, dejando a un lado la creación.
Y aunque parezca increíble, aquí mismo acaba nuestro repaso, con casi un artículo por cada año en este último período, incluido un 2011 en blanco, y la sensación de que el juego estaba entrando en una fase de «stand by» inquietante. La revista cambiaría su formato a finales del 2012 y en diciembre de ese año haría su aparición el nuevo juego basado en la primera de las películas basadas en El Hobbit.
Creo que en esta última etapa no se aprovecharon recursos como algunos informes de batalla o lanzamientos (mención especial el escenario de La última marcha de los Ents y su correspondiente tablero, o las miniaturas de los Elfos) a partir de los cuales podrían haberse desarrollado otros artículos, aunque hubieran sido de los pequeños y escuetos, en los que explicar algunos conceptos más sobre otras regiones menos exploradas.
Creo que el próximo mes retomaremos la serie tal cual, repasando algunos artículos más de escenografía correspondientes a los otros dos grandes juegos de la compañía, muy probablemente para cerrar así esta larguísima andadura. Pero como digo, eso será el próximo mes.
LA TABERNA DEL ALMIRANTE BENBOW 